Este ejercicio se trabajará esta semana en clase, traer la fotocopia.
Los pasos para aplicar las licencias poéticas son:
Los pasos para aplicar las licencias poéticas son:
1) Contar las sílabas de manera usual (dejar el número al lado del verso)
2) Fijarse en la última palabra, si es AGUDA (+1) , si es GRAVE se queda (=), si es ESDRÚJULA (-1).
3) Marcar las licencias poéticas.
SINALEFA. Es obligatoria, unión de dos vocales contigua (se marca con un arco) (-1)
HIATO. Cuando no hay sinalefa no suma ni resta, se marca //
SINÉRESIS. Unión de dos vocales que no forman diptongo dentro de una palabra. (-1) (cree-me)
DIÉRESIS. Separación de vocales que forman diptongo dentro de una palabra. (+1) (cu-ï-da-do)
2) Fijarse en la última palabra, si es AGUDA (+1) , si es GRAVE se queda (=), si es ESDRÚJULA (-1).
3) Marcar las licencias poéticas.
SINALEFA. Es obligatoria, unión de dos vocales contigua (se marca con un arco) (-1)
HIATO. Cuando no hay sinalefa no suma ni resta, se marca //
SINÉRESIS. Unión de dos vocales que no forman diptongo dentro de una palabra. (-1) (cree-me)
DIÉRESIS. Separación de vocales que forman diptongo dentro de una palabra. (+1) (cu-ï-da-do)
Debes medir el poema de LA SENTENCIA DEL JUSTO de Sor Juana Inés de la Cruz.
La Sentencia del Justo
Firma Pilatos la que juzga ajena
Sentencia, y es la suya. ¡Oh caso fuerte!
¿Quién creerá que firmando ajena muerte
el mismo juez en ella se condena?
Sentencia, y es la suya. ¡Oh caso fuerte!
¿Quién creerá que firmando ajena muerte
el mismo juez en ella se condena?
La ambición de sí tanto le enajena
Que con el vil temor ciego no advierte
Que carga sobre sí la infausta suerte,
Quien al Justo sentencia a injusta pena.
Que con el vil temor ciego no advierte
Que carga sobre sí la infausta suerte,
Quien al Justo sentencia a injusta pena.
Jueces del mundo, detened la mano,
Aún no firméis, mirad si son violencias
Las que os pueden mover de odio inhumano;
Aún no firméis, mirad si son violencias
Las que os pueden mover de odio inhumano;
Examinad primero las conciencias,
Mirad no haga el Juez recto y soberano
Que en la ajena firméis vuestras sentencias
Mirad no haga el Juez recto y soberano
Que en la ajena firméis vuestras sentencias